Escrito por Dr. Joan Francesc Fondevila Gascón el 28/03/2017 a las 20:47:21
(Professor titular d’Universitat )
La mayor parte de ámbitos productivos de nuestra sociedad dependen de la conectividad. Las empresas que no están conectadas no existen o están a punto de dejar de existir. Sociedad de la Banda Ancha en grado puro. La prospectiva sobre tendencias de futuro en este ámbito es diáfana.
Así, la multiplicación del tráfico IP (casi tres veces mayor en 2020 que en 2015: se llegará a los 2,3 Zettabytes anuales en el mundo, según el Informe anual Cisco Visual Networking Index Global Forecast and Service Adoption 2015-2020), la adopción de dispositivos personales y el fortalecimiento del Máquina a Máquina (M2M) implican más demanda de conectividad. De esta forma, los 4.100 millones de usuarios de Internet que se prevén en 2020 contarán con una cifra de dispositivos conectados impensable pocos años atrás. Así, en 2020 existirán 26.300 millones de dispositivos conectados. Eso arroja una media de 3,4 dispositivos por cada habitante. En 2015 se contabilizaban 16.300 millones de dispositivos. En el caso español, la cifra de dispositivos conectados será de 340 millones. Ello supone 7 conexiones por habitante. Sí, por mucho que sorprenda, cada ciudadano contará, de media, con siete aparatos conectados a Internet. A bote pronto, al lector se le ocurren el ordenador de sobremesa (que irá in diminuendo), el smartphone (muchos usuarios dispondrán del personal y del laboral), la tableta… y los wearables. En 2015 se acumulaban 186 millones de dispositivos conectados, es decir, 4 conexiones per cápita. Disquisiciones orwellianas al margen, el impulso que ese incremento representará para la industria comunicativa y tecnológica confirmará que se trata de la intersección productiva clave. Por ende, el factor conectividad depende cada vez más del denominado Internet de las Cosas, el Internet of Things (IoT). También resultan determinantes las conexiones M2M. La evolución del IoT, es decir, conectar objetos hace poco proyectados a la ciencia ficción, está en la base de la multiplicación de dispositivos por usuario. En España se prevén 210 millones de conexiones M2M en 2020. Se trata del 62% del parque total de dispositivos conectados, es decir, la mayoría. En 2015 existían 82 millones de conexiones Máquina a Máquina, lo que implica una tasa de incremento interanual del 20,7%. Otro fenómeno previsible es que el tráfico generado por los smartphones supera de forma decidida al de los ordenadores. En 2020, el 71% del tráfico IP provendrá de dispositivos diferentes al universo personal computer. En el caso español, el 60% del tráfico IP será responsabilidad de dispositivos distintos al ordenador. Concretamente se calcula que smartphones (23%), tabletas (17%), televisores (15%) y módulos M2M (5%) liderarán, en conjunto, una conectividad que, en el caso del ordenador, menguará hasta el 40% (cuando en 2015 era del 69%). Sobre ello trataremos en las XXII Jornadas del Cable y la Banda Ancha en Cataluña (4-5 de abril, Campus del Poblenou de la Universitat Pompeu Fabra), organizadas por CECABLE, Acotec y UPF. Por tanto, la movilidad catalizará el factor conectividad. Dr. Joan Francesc Fondevila Gascón Director del CECABLE (Centro de Estudios sobre el Cable) y profesor titular de Universidad Autor del blog científico http://www.telecomunicacionesyperiodismo.com/ |